La audiología es una rama de la especialidad de la otorrinolaringología que se encarga del estudio, diagnóstico y tratamiento de las alteraciones relacionadas con la audición, especialmente la sordera, la disminución de la capacidad auditiva y el equilibrio. Se han recogido datos de personalidades diagnosticadas con sordera desde los siglos IV antes de Cristo; sin embargo, no es hasta la década de los años cuarenta del siglo XX que comienza a utilizarse este término en publicaciones, al igual que el término de audiólogo.
Con el avance tecnológico del siglo pasado, la audiología ha escalado vertiginosamente buscando encontrar el confort del paciente que padece de hipoacusia u otras enfermedades relacionadas con la audición.
En los años 495-435 A.C. se consideró que el sonido era un movimiento ondulatorio, logrando avanzar en la determinación de la audición, se pensaba que el sonido llegaba a la caja timpánica, sin la intervención directa de las vías auditivas ni del cerebro, pues funcionaba mediante la resonancia. Hubo personalidades que se dedicaron a la observación y estudio de este fenómeno y que aportaron conocimientos importantes como:
Hipócrates: Este famoso doctor griego creyó que estos fenómenos estaban relacionados con la dirección del viento, el cambio del tiempo y el zumbido.
Galeno: Otro estudioso de estos temas en aquella época, establece la fisiología del oído llegando a determinar las consecuencias que generan las patologías que afectan el oído medio, afecciones que se evidencian mediante un dolor de oído, dureza de oído, audición errónea, alucinaciones auditivas, entre otras.
Aristóteles: Pensó que existían medios de trasmisión de sonido haciendo una diferenciación de conceptos como grave y agudo y relacionó la audición con el lenguaje y el pensamiento; estipuló un concepto conocido hoy en día y es, que una persona sorda es una persona muda.
Tiempo atrás se consideraba la audiología como un pequeño campo dentro de la comunicación, a diferencia de otras ciencias que en un principio impactaron mayoritariamente a toda la sociedad; sin embargo, existían especialistas en ramas diferentes, que se encargaban de tratar patologías denominadas exclusivas de la audiología.
El sonido fue utilizado por el doctor romano Arhigenes para intentar estimular el sistema auditivo. Mientras que, en el siglo VI, el médico Alexander de Tralles hizo apuntes de formas para tratar la pérdida de audición. Autor de varias obras relacionadas con diferentes temas de la medicina, incursiona en el campo de la audiología al intentar introducir hierbas medicinales soplando, con una corneta en el canal del oído para tratar pacientes con pérdidas de audición.
Hacia la segunda mitad del siglo XIX aparece la especialidad de Otorrinolaringología con un avance asombroso al aparecer los equipos endoscópicos. Entre las figuras importantes que aportaron a la audiología en esta etapa podemos destacar a:
Jean Marc Gaspar Itard, famoso médico francés que se interesó sobre la concepción de la sordera en su época. Precursor de la pedagogía para sordos. Autor de numerosos trabajos en otología, audiología, foniatría y neurología entre otros aportes.
Miller Reese Hutchisonma, ingeniero eléctrico e inventor estadounidense. Desarrolló algunos de los primeros dispositivos eléctricos portátiles, como la bocina de un vehículo y un audífono.
No es hasta finales de la década de los 40 del siglo pasado que comienza el uso de estos términos, reconociendo al médico Raymond Carhart como el pionero de la audiología.
Carhart comenzó estudiando “Ciencias de la Audición” y se graduó en Logopedia y Psicología en la Universidad de Dakota, 1932. Continuó con su formación y, cuatro años después, se doctoró en Logopedia. Durante la Segunda Guerra Mundial muchos soldados habían sufrido pérdida de audición y Carhart fue encargado de su recuperación. En 1945 acuñaría por primera vez el término “Audiología” para designar la ciencia que estudia los problemas y patologías del sistema auditivo. A partir de ese momento, la Audiología adquiriría identidad propia y se separaría de la Logopedia como disciplina independiente. Una vez finalizada la contienda, se reincorporó a la Universidad de Northwestern y puso en marcha el primer programa universitario que abordaba en profundidad esta área de la medicina. Fue en dicha institución donde permaneció como profesor e investigador hasta su repentino fallecimiento en 1975. Dejó un valioso legado a sus sucesores con el desarrollo de las logoaudiometrías y del “notch de Carhart“, un patrón audiométrico con el que se puede identificar la otosclerosis o endurecimiento de los huesos del oído medio.
Durante la primera y segunda guerra mundial, los trastornos auditivos tuvieron una alta prevalencia en la población militar, ya que los soldados se vieron sometidos a los más altos niveles de ruido debido a las detonaciones de las armas de fuego por lo que padecieron de algún tipo de lesión del aparato auditivo inducida por ruido; esto conllevó a implementar sistemas de protección auditiva eficientes, con el fin de elevar la calidad de vida de los expuestos y evitar la discapacidad auditiva.
Por la sexta década del siglo pasado, los programas de audiología llegaron a ser más comunes. Los métodos de diagnóstico clínico eran cada vez más objetivos incrementando su especificidad y sensibilidad.
El conocimiento de la historia del desarrollo de la audiología y los responsables del descubrimiento de los diferentes fenómenos involucrados en esta ciencia, permite la compresión sistemática de la fisiología de los procesos que intervienen en la audición.